Poms es el tipo de película que te hace pensar que al envejecer quisieras ser como esos personajes.  Martha se muda a una residencia de ancianos, su nueva amiga Sheryl, descubre que fue animadora cuando era joven. Pero que tuvo que dejarlo.

Sheryl anima a Martha a formar un equipo de animadoras con las otras ancianas de la residencia, por lo que empiezan las audiciones ¡solo puedo decir que vas a reír mucho!

Pero la cosa no termina ahí; el equipo decide participar en una competición de animadoras, por lo que contratan a una joven animadora para que las entrene. Un equipo de animadoras poco convencionales que demuestran que la edad no importa.